El pasado domingo 15 de enero, Elvis Francois, un dominico de 47 años de edad, fue rescatado, tras haber pasado 24 días en altamar. Para el momento de su rescate, se encontraba a 120 millas náuticas de La Guajira colombiana.
Infobae
«24 días sin tierra, sin nadie con quien hablar, sin saber qué hacer o donde estás, es duro«, dijo el hombre, según reseñó Infobae.
Aparentemente, los guardacostas recibieron la alerta de un velero que tenía escrito en el casco la palabra «Help«. El aviso llegó a la Estación de Guardacostas de Santa Marta que activó el protocolo de búsqueda con la Dirección General Marítima y el Servicio Nacional Aeronaval de Panamá.
A través de una aeronave, se estableció el punto de ubicación del náufrago que para entonces estaba a 120 millas náuticas de La Guajira. Francois afirmó que fue esa aeronave la que le devolvió la esperanza de sobrevivir, cuando pensaba que no iba a salir de aquella situación.
«El 15 de enero vi un avión pasar. Estaba haciendo señales con un espejo, pero no me vieron. Los vi pasar alrededor mío, hasta que pasaron rápido por encima y volvieron a pasar dos veces«, comentó.
Los detalles
Según refirió, el día que se perdió en el mar, se encontraba trabajando en la reparación de un velero, al que había que montarle la vela y poner en funcionamiento el motor. Estaba entonces en la isla de Saint Maarten en las Antillas Holandesas
Estaba con otro compañero, que salió de la embarcación un momento, justo en el cual fue arrastrado por la corriente. A pesar de que trató de montar la vela para volver al puerto, el proceso le tomó mucho tiempo y, cuando cayó en cuenta, ya había perdido el control de la embarcación y se había distanciado demasiado.
No tardó en perder la señal y no poder, por consiguiente, comunicarse con sus compañeros y familiares.
«No había nada que pudiera hacer que sentarme a esperar. No tenía comida, solo una botella de salsa de tomate que había en el bote, polvo de ajo y un caldo Maggi; lo combiné con agua y eso me dio para sobrevivir 24 días en el mar«, narró.
Contó, del mismo modo, que tenía pocos conocimientos en navegación, por lo que, cuando dejó de ver tierra firme, se desorientó. Lo único que logró hacer para intentar ser rescatado fue escribir en el casco de la embarcación la palabra «ayuda» en inglés, además de hacer señales de auxilio a cualquier objeto que viera moverse.
«Vi botes pasar, traté de alertarlos, pero no me vinieron. Traté de prender fuego en el bote para que pudieran verme pero no me vieron. Estuve sacando agua del bote para mantenerme vivo porque si no, me hundía. Fue toda una experiencia», contó.
Redacción Maduradas con información de Infobae
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