Durante los primeros nueves meses del año 2022, los ciudadanos rusos gastaron un 70 % más de dinero en la compra de antidepresivos y tranquilizantes, en medio del conflicto armado iniciado contra Ucrania.
Según informó el Centro de Desarrollo de Tecnologías Punta a la agencia TASS, los rusos han gastado este año unos 5.000 millones de rublos, es decir más de 80 millones de euros, en productos farmacológicos.
Los rusos compraron 8,4 millones de envases de ese tipo de fármacos, un 48 % más que en el mismo período de 2021, las ciudades que encabezan los listados de consumo son Moscú y San Petersburgo, así como también la región de Rostov, que limita con el Donbás ucraniano.
Este aumento en el consumo de estos fármacos trajo como consecuencia un incrementó de un 42 % la importación de antidepresivos por parte de Rusia, mientras que también aumentó un 44 % el consumo de tranquilizantes entre los rusos, que gastaron un 58 % más en esas medicinas.
Una de las regiones donde más creció la compra de tranquilizantes, un 16 %, fue Bélgorod, una de las más afectadas por los sabotajes ucranianos.
Según los sondeos, el apoyo total a la “operación militar especial” entre los rusos se ha reducido desde que el presidente, Vladímir Putin, decretó el pasado 21 de septiembre la movilización parcial, lo que se suma a los reveses sufridos por el Ejército ruso en el campo de batalla en los últimos dos meses.
Redacción Maduradas con información de EFE
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