Un documento de 41 páginas detalla los alcances y características de los arreglos que el gobierno encargado de Juan Guaidó conseguiría con la empresa norteamericana Silvercorp.
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Pese a lo que afirma el régimen de Nicolás Maduro, el contrato no se encuentra firmado por Juan Guaidó, quien es llamado en el texto como “Comandante en jefe”.
Tal Cual tuvo acceso al escrito completo, cuyo objetivo principal era sustraer a Maduro del poder y, una vez logrado, la contratista quedaría operando en Venezuela por más de 12 meses.
El contrato fue firmado por los asesores de Guaidó y el exmilitar estadounidense Jordan Goudreau en representación de Silvercorp, para que ordenara servicios de seguridad especial incluyendo una operación de “extracción” de Maduro, en octubre de 2019.
Desde su primera página el documento indica que Silvercorp tenía 45 días para prepararse, gestionar el equipamiento y alistar la misión, incluyendo la incorporación y entrenamiento de combatientes en el exilio, por un valor de 50 millones de dólares.
Es el tiempo en el que JJ Rendón, firmante del acuerdo, asegura que quedó manifestado que Goudreau no había cumplido lo acordado y por consecuente el contrato terminó anulado.
El gobierno interino se comprometía a cancelar después de cumplida la misión (la sustracción del actual régimen y la instalación de un gobierno legítimo) un máximo de 16 millones de dólares mensuales hasta la culminación del acuerdo. El texto firmado el 16 de octubre de 2019 con una fecha de finalización 450 días (15 meses) más tarde de completada la misión, para un total de 212 millones de dólares.
“El objetivo primario del convenio era la ‘captura/detención/remoción’ de Nicolás Maduro del poder y su sustitución por Juan Guaidó como reconocido presidente venezolano, cuyo cumplimiento incluía un bono por 10 millones de dólares”, detalla Tal Cual.
El escrito resalta la urgencia del caso, y determina que si Maduro dejara el poder antes, ya sea por voluntad propia o forzado por otros actores (grupos o gobiernos), o cediera el poder a otra persona antes de culminada la misión de Silvercorp, el contratista continuaría empleado hasta el término del contrato.
Cuando se considerara que el objetivo principal se consiguiera, Silvercorp quedaría en una posición de asesores en restituir la estabilidad, protección presidencial, operaciones de contaterrorismo y recuperación de activos venezolanos robados alrededor del mundo.
El acuerdo establece que la empresa norteamericana debía hallar inversionistas privados que ayudaran a financiar la operación, aunque el gobierno interino podría hacerlo sin terceros, cuyos préstamos terminarían pagados por el “gobierno legítimo” posteriormente. Esos posibles inversionistas privados quedarían en un estatus preferencial frente a la nueva política.
La línea de comando
El contrato suscrito indica que la línea de comando es la siguiente:
Comandante en jefe: Juan Guaidó
Supervisor general: Sergio Vergara
Jefe de estrategia: Juan José Rendón
Comandante en el sitio: Por determinar
En una entrevista ofrecida al programa Conclusiones para CNN en Español este miércoles 6 de mayo, JJ Rendón reconoció haber firmado el acuerdo con Goudreau para “explorar” todas las opciones con el objetivo de detener a Maduro y llevarlo ante las autoridades norteamericanas.
Aclaró que en ningún momento se planteó atentar contra la integridad del líder socialista, como este ha asegurado en reiteradas oportunidades.
También admitió que pagó $ 50.000 al exboina verde, pero que Guaidó no suscribió el contrato, ya que ese documento solo contó con su firma y la de Sergio Vergara, exjefe de la fracción parlamentaria del partido Voluntad Popular.
Por último, Rendón resaltó que a ese contrato “no se le dio luz verde” el año pasado porque el presidente interino de la República así lo ordenó y porque él no se confió del plan presentado por Goudreau.
Puede leer el documento completo aquí.
Redacción Maduradas con información de Tal Cual.
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