«Mi conclusión es ahora que nuestra seguridad será mejor si apoyamos la capacidad de Ucrania para defenderse de Rusia», expresó este domingo 27 de febrero la primera ministra de Suecia, Magdalena Andersson, quien así ha dejado claro que se apoyará con armas a Ucrania para que esta nación pueda repeler la invasión rusa ordenada por su presidente, Vladímir Putin.
Aunque han roto la tradición, dado que Suecia abandonó oficialmente su postura de neutralidad desde el final de la Guerra Fría, sigue siendo oficialmente «no alineada» y al margen de las alianzas militares.
A la histórica medida adoptada Suecia, se suma la decisión también tomada por Alemania, nación que aprobó el suministro de armas a Kiev en un giro de 180 grados, en su rol, desde que comenzó el mayor conflicto en Europa de los últimos años.
La invasión rusa de Ucrania llega a su quinto día. En paralelo, Putin ha forzado a su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, a negociar en la ciudad bielorrusa de Gómel, en lo que parecería un intento de acabar con el conflicto, que podría derivar en uno de todavía mayor envergadura en Europa.
De acuerdo a medios internacionales, Kiev está sitiada por las tropas y los carros de combate rusos. En este momento nadie puede salir ni entrar de la capital, mientras que las Fuerzas Armadas de ese país retomaron el control de Járkov, la segunda urbe más importante, que estuvo a punto de caer tras horas de intenso combate mano a mano.
El Ministerio de Defensa de Ucrania emitió un nuevo reporte sobre las bajas rusas. Según informaron, las fuerzas del vecino país sufrieron 5.300 bajas entre sus tropas. Rusia también ha perdido 816 vehículos blindados de combate, 291 automóviles, 191 tanques, 60 depósitos de combustible, 29 aviones, 29 helicópteros, 74 piezas de artillería, 21 lanzacohetes Grad, cinco antiaéreos, dos buques, tres drones y un sistema de misiles Buk, informó el diario The Kyiv Independent, citado por Infobae.
Asimismo, la alta comisionada para los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Michelle Bachelet, afirmó que desde el inicio de la invasión rusa contra Ucrania han registrado 102 civiles muertos, incluyendo siete niños, y advirtió que las cifras reales en el terreno pueden ser «considerablemente» más altas.
«La mayoría de los civiles murieron por la acción de armas explosivas con una amplia área de impacto, incluyendo artillería pesada y sistemas de cohetes con multilanzamientos y en bombardeos», afirmó Bachelet ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. «Me temo que el balance real sea considerablemente más alto», insistió la funcionaria.
En paralelo, desde la Unión Europea (UE) se ha avanzado en más sanciones desde el pasado viernes 25 de febrero. Ese día, los sancionados fueron el propio presidente ruso, Vladímir Putin, y el ministro de Exteriores de ese mismo país, Serguei Lavrov.
Un día después, Estados Unidos, la UE, Canadá y el Reino Unido acordaron bloquear determinados bancos rusos en el sistema bancario Swift e imponer «medidas restrictivas» al Banco Central ruso en respuesta por la invasión de Ucrania.
«Nos comprometemos a asegurar que determinados bancos de Rusia son sacados del sistema de mensajes Swift. Esto garantizará que estos bancos quedan desconectados del sistema financiero internacional y alteran su capacidad para operar globalmente», señaló un comunicado conjunto difundido por la Casa Blanca, y también suscrito por Canadá.
Redacción Maduradas con información de Los Ángeles Times, Infobae, Europa Press, EFE, OTAN, ABC y Huffpost
Lea también:
¡LO ÚLTIMO! Representaciones de Rusia y Ucrania negociarán en Bielorrusia, según delegado de Putin