Resulta por demás obvio que la situación de escasez de divisas se acentúa, en la medida que pasan los días. Las asignaciones de CADIVI y SICAD, no cubren los requerimientos del mercado, las subastas (¿hay subastas?) y, además, el tema del paralelo que no puede tratarse de manera pública y abierta, ha logrado multiplicar por diez la angustia en el sector.
Es por ello que esta semana, reproduciremos en gran parte nuestra nota Entorno Energético del pasado 4 de julio de 2013, lo cual estimamos pertinente, solo para refrescar lo sabido desde hace ya mucho tiempo atrás. Por supuesto haremos algunos incisos pertinentes que confirman lo antes expresado.
“No resulta muy complicado concluir que más allá de la ineficiencia, la lenta burocracia y el reparto de las alícuotas de divisas (tráfico de influencias y corrupción), el asunto es que, las divisas no alcanzan y el proveedor, PDVSA, no puede aumentar el aporte, por lo contrario, parece verse una tendencia a la reducción de dichos aportes.
Mucha gente, se niega a entender el asunto, porque el Presidente de la empresa y Ministro de Energía y Minería, habla de sus extraordinarios negocios; ventajosos convenios y acuerdos con países hermanos y amigos; aumento de producción de la Faja; eficiente operación de refinerías; incorporación de volúmenes incalculables de gas al mercado nacional e internacional y la solidez económica y financiera de PDVSA.
Obvio que luego de estos discursos de Rafael Ramírez, resulta casi imposible creer que PDVSA no aporte las divisas requeridas. Es precisamente allí, donde está el fondo del asunto, en creer en un discurso colmado de cifras falsas y/o inventadas, acomodadas.
Se trata de un grupo de mentirosos compulsivos, encabezados, en la materia petrolera, por Rafael Ramírez que caen específicamente, dentro de la pseudología fantástica que comprende historias contadas que no son del todo improbables, ya que a menudo tienen algún atisbo de verdad”.
Para completar su poder dentro del régimen neo totalitario, donde el Estado controla, en la práctica, todos los espacios, el señor Ramírez fue nombrado, algo así como el zar de las divisas del país, el todopoderoso en la materia económica y distribución de los guisos. Es decir, conforma con Diosdado y Nicolás, el triunvirato designado por La Habana para controlar a Venezuela.
Las mentiras de Ramírez no han cesado, por lo contrario se han multiplicado en estos últimos meses, solo que ya no están circunscritas al ámbito de la energía, como el Plan Siembra Petrolera que cada año ha venido ajustando de acuerdo a los resultados negativos, para luego relanzar el programa, como siempre, con promesas de futuro.
Incluyamos, entre ellas, la producción de 6 millones de barriles diarios en 2010, meta antes prometida para el año 2009; las nuevas refinerías en el país, mentira también remozada recientemente; la participación en la refinería de Pernambuco en Brasil; la construcción de refinería “Gran Sueño de Bolívar” en Nicaragua 2007, donde se asignaron 250 millones dólares y solo existe la primera piedra; el gasoducto Venezuela-Argentina, mentira recientemente reactivada; en fin, un sin número de promesas incumplidas. Pues ahora el señor Ramírez, ha agregado a su repertorio, las mentiras económicas, nos habla de controlar el mercado paralelo, de las abundantes divisas que ingresan al país y de la batalla inclemente contra la inflación. Sin duda, su gran fortaleza es su extraordinaria capacidad para mentir, haciéndole creer, a mucha gente, lo que él no cree.
También apuntábamos en la referida nota del 04 de julio, lo siguiente:
“Pero no hemos respondido, todavía, la pregunta, relacionada con la falta de divisas. Para ello dejaremos a su consideración algunos elementos que le permitirán formarse su propia conclusión y establecer sus propias opciones de resolución del asunto.
1. Venezuela produce alrededor de 2 millones 400 mil barriles por día que al sumarle los 400 mil barriles diarios de crudo comprados en el exterior y 150 mil barriles de crudo equivalente de los líquidos del gas, configuran la falsa cifra de 2 millones 950 mil barriles que le gusta referir al Sr Ramírez.
2. Corresponde a PDVSA una producción de 1 millón 350 mil barriles diarios como esfuerzo propio, a los cuales sumamos un promedio de 62% de la producción de las empresas mixtas y de la Faja que le corresponden a PDVSA, es decir 650 mil barriles diarios. En resumen, a PDVSA le corresponden 2 millones de barriles y a las empresas mixtas 400 mil barriles diarios.
3. Veamos cómo se distribuyen los 2 millones de barriles de PDVSA:
* 650 mil barriles al consumo nacional de productos, gasolinas, diésel, jet, kerosene, etc. Vendidos a pérdida, precios de regalo.
500 mil barriles diarios (crecerá hasta 630 mil) destinados a cumplir compromisos con China.
* 105 mil barriles diarios enviados a Cuba (momentos puntuales de 125 mil barriles) que se “pagan” con servicios, nada en efectivo.
* 150 mil barriles de Petrocaribe, 18 países (16 excluyendo a Cuba con trato aún más preferencial y a Venezuela, el benefactor), los cuales supuestamente se pagan 50% de contado a 60 – 90 días y el otro 50% en 15 años, al 2% de intereses con 2 años de gracia. El “pago” en especies (frijoles, arroz, café, azúcar, papelón, vaquillas, pollos, huevos, pero valorados a precio de mercado).
* 75 mil barriles diarios para el Acuerdo de Cooperación Energética de Caracas (Bolivia, Uruguay, Paraguay), con facilidades de “pago” que se hace en especies y servicios de largo plazo.
* 35 mil barriles diarios para Argentina como parte del Convenio Integral de Cooperación, cuyos “pagos” se hacen en especies y servicios como convenio de largo plazo.
* 20 mil barriles diarios a Bielorrusia como parte del tratado de comercio bilateral que incluye asesoría en construcción de viviendas, insumos agrícolas y armamento militar.
En resumen, estamos hablando de 1 millón 530 mil barriles que bien, ya fueron pagados en su mayor parte, como es el caso de China o que se pagan con servicios, asesorías, bienes o insumos. No recibimos, en la práctica, compensación en efectivo por estos barriles.
Del volumen remanente de 470 mil barriles, unos 20 mil barriles diarios en promedio se dirigen, de manera ocasional, a India y otros países y, en base continua, 450 mil barriles se envían y se venden, al contado, en los Estados Unidos. Mientras, un volumen complementario de unos 400 mil barriles, se compra a precios de mercado para cumplir los requerimientos de CITGO.
Vale decir, como colofón que Venezuela compra algunos de los productos que debe entregar a precio de mercado, como por ejemplo el diésel 0.5% de azufre que envía a Argentina, porque no lo produce en Venezuela. No olviden las compras de gasolina para al mercado nacional y “clientes” que son divisas que salen”.
Ahora bien, si luego de considerar lo anterior, usted le agrega, los desvíos propios de la impunidad absoluta en los hechos de corrupción que se multiplican; los elevadísimos costos de producción; la perdida diaria que se deriva del regalo de combustibles en el mercado local que incluye el volumen destinado al contrabando para favorecer a sectores militares y la creciente nómina de prosélitos que allí se incluyen; usted tendrá que concluir que no pueden haber divisas, porque PDVSA no las aporta.
Con información de: Actualidad Venezuela / Horacio Medina.