El consumo de yuca amarga sigue dejando víctimas en todo el país. Nada más en el estado Monagas se registró esta semana la tercera muerte en lo que va de año.
Foto: Diario La Verdad
La última víctima fatal por comer el tubérculo fue una niña de 2 años de edad llamada Omaira Rivas Hernández, quien comió casabe hecho por su mamá, Marisol Hernández Pildaín, reseña El Pitazo.
El casabe también fue consumido por seis sobrinos y una mujer, quienes también asistieron a la emergencia del Hospital Universitario “Dr. Manuel Núñez Tovar”. El hecho ocurrió en San José de Buja, un asentamiento indígena ubicado al sur de Maturín.
Al menos 173 personas se han intoxicado en el estado Monagas entre julio de 2016 y marzo de 2017.
Redacción Maduradas, con información de El Pitazo
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