Pese a no existir cifras oficiales por parte del Banco Central de Venezuela, la inflación se siente en cada cosa que compramos, es por ello que la firma Ecoanalítica estima que para finales de octubre esta se ubicaría en 185%, mientras que la subyacente «está en el orden cercano al 365%».
Asdrúbal Oliveros, director de la firma, quien explicó que en Ecoanalítica se hacen dos mediciones, con una muestra de 502 productos que emula la canasta que mide el Banco Central de Venezuela (BCV) y la inflación tradicional.
“Es decir, rubros regulados, no regulados, lo público y privado y también se mide una inflación subyacente, donde entra más el peso de los precios que se están ajustando el mercado paralelo, la reventa, medida desde el 2008 por la necesidad que tenían muchas compañías de poder tener una medición más certera para evaluar costos”, explicó.
Durante un foro realizado por el Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), en Caracas, con motivo a celebrarse el Día Nacional del Comercio y los Servicios, Oliveros, sostuvo que frente a la coyuntura que se vive actualmente, este sector debe ver en el endeudamiento una oportunidad.
“Incluso no hay que tener complejo de endeudarse con la banca pública, por tener una tasa de interés de un pagaré de un 4% o en tarjetas de crédito en 29% y una inflación de 180 o 150%, obviamente tiene ahí una oportunidad para aprovechar”, agregó.
Entre otros datos, Oliveros, detalló que pese a la merma de 66% en la asignación de divisas a través de los mecanismos oficiales, se estima una caída de 9% en las importaciones, dando a entender que la tendencia hasta ahora “irreversible” se mantienen desde lo público, situación que ha generado que el sector privado “no se eche a morir, se han rebuscado, dedicándose a otras áreas debido a la falta de materias primas para su sector principal”.
Durante la actividad, Cipriana Ramos, presidenta de Consecomercio, reiteró que las medidas económicas tomadas por el Estado sobre más regulaciones al sector privado, como la regulación del precio de los huevos, terminan afectando a los venezolanos.
“Actualmente, comerciantes somos todos, porque todos estamos haciendo una actividad de comercio para poder sobrevivir, pero qué hacemos con esas personas que no tienen recursos y tienen que pedir prestado o comprar productos que no necesitan para poder comprar otros, por eso le hacemos un llamado al Gobierno, piense en ese consumidor que está pasando trabajos todos los días”, enfatizó Ramos.
Ramos señala que no maneja una cifra global del número de empresas cerradas por falta de productos, que a su juicio debería ser dada por el Instituto Nacional de Estadísticas, sin embargo, explica que en todos los estados se presenta esta problemática.
“Hay muchos negocios cerrados, no definitivamente, pero sí cerrados por la circunstancia que está a la perspectiva que tiene que volver a abrir”, manifiesta Ramos.
La representante del sector comercial, presentó una agenda legislativa productiva que aspira sea revisada por la nueva Asamblea Nacional que será juramentada el 5 de enero próximo.
Con información de Panorama.