El cadáver de una mujer fue llevado a la morgue de Carletonville, Sudáfrica, luego de que fue declarada muerta tras sufrir un accidente vial.
Los paramédicos que atendieron el choque aseguraron que la mujer no presentó signos vitales, pero un empleado de la morgue inspeccionó el cuerpo en la nevera y observó que la mujer respiraba.
Los familiares de la víctima instaron a las autoridades a realizar una investigación, debido a las consecuencias que esto pudo acarrear.
“Como familia, no hablaremos al respecto a no ser que la policía, los paramédicos y los funcionarios de la morgue estén presentes. Necesitamos respuestas”, dijo uno de los parientes de la mujer, indicando que los demás familiares está conmocionados.
Gerrit Bradnick, gerente de operaciones de Distress Alert, defendió su compañía y aseguró que no existen pruebas de negligencia.
«Esto no sucedió porque nuestros paramédicos no estén debidamente capacitados«, sostuvo.
Redacción Maduradas con información de BBC Mundo
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