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¡TERMINA DE ECHAR EL CUENTO! Lo que Maduro no dijo sobre el caso de Robert Serra (+ Video)

Thábata Molina, periodista de sucesos del diario El Universal, aseguró este lunes que Padilla Leiva, alias “El Colombia”, es el “pran” de los edificios de la Misión Vivienda en La Paz y que el lunes abalearon a uno de los supuestos asesinos de Serra. Así lo dijo por vía Twitter: “Lo que no dice Nicolás es que “El Colombia” era el pran de los edificios de la Misión Vivienda de La Paz. “El Colombia” era uno de los tantos delincuentes que viven en Misión Vivienda La Paz, conocidos como Rodeo I y rodeo II”.

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Agregó que: “Lo que no dice Nicolás es que el lunes en la noche hubo otro tiroteo en la Misión Vivienda La Paz donde mataron a otro de los que participó”, al tiempo que cuestionó las acciones del Gobierno al preguntar: «¿Dónde están los presos?».

Hermetismo total

El martes 7 de octubre una situación irregular dejó al menos 5 muertos en Quinta Crespo, Caracas. Los abatidos eran todos miembros de los llamados colectivos, grupos que el propio Gobierno Nacional incentivó y creó.

Ese día cayó el jefe de una plataforma que agrupa a más de 100 colectivos en sus filas llamado Frente 5 de Marzo. Su nombre era José Odreman. Sobre cómo murió el Gobierno dio pocas respuestas, hasta que José Gregorio Sierralta aseguró que se trataba de un delincuente jefe de una banda de secuestradores. Esto desató la polémica.

Familiares comenzaron a dar declaraciones sobre las vinculaciones de Odreman con el Gobierno. Varias fotografías lo colocan junto a Rodríguez Torre, Cilia Flores, Maduro, Chávez y Robert Serra, diputado asesinado una semana antes y también vinculado a los colectivos. La hermana de Odreman aseguró que el cuerpo tenía 40 impactos de balas incrustadas hasta los huesos y la escena del crimen evidenciaba una masacre.

El equipo de investigación de NTN24 se adentró al verdadero conflicto que el Ejecutivo parece querer ocultar. Un mes antes de morir, el propio José Odreman abrió las puertas de la sede del colectivo en Cotiza a nuestras cámaras con la intención de «limpiar el nombre» de estas organizaciones. Se nos permitió ver los entrenamientos y formación que se hace a miembros de diferentes comunidades, algo muy diferente a la forma de actuar de colectivos como La Piedrita o los llamado Tupamaro.

La investigación muestra vídeos inéditos y audios que dan pistas sobre lo que hay detrás de estos asesinatos. Un grupo que antes el Gobierno usaba como un brazo de la revolución, hoy es tildado de banda criminal, pero no explican cómo, si estos son delincuentes, podían estar vinculados con altos cargos y ser funcionarios públicos. Muchas preguntas sin respuesta y con hermetismo total del Ejecutivo Nacional.

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