En Venezuela, todo vale en dólares y cuando se trata de salud, el valor se triplica. En Ciudad Guayana, estado Bolívar, el costo por la recarga de una bombona de seis metros cúbicos, la más grande para atender a pacientes de COVID-19, varía entre los 40 y 80 dólares.
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Además de esto, el número de recargas podría ser un gasto que supere los 1,000 dólares dependiendo de lo que consuma el paciente durante su enfermedad, reseñó Correo del Caroní.
El encargado de una distribuidora de oxígeno, Antonio Poth, alquila los cilindros más grandes a 50 dólares. Calcula que con una salida de tres litros por minuto el oxígeno se podría consumir en unas 24 horas, pero todo depende del paciente, ya que si necesita un consumo mayor, el tiempo se reduciría.
“Le puede pasar que se agote a la media noche, o una hora de la madrugada ¿y a dónde va salir a buscar la otra?”, dijo al medio. Recomendó tener una bombona de repuesto, sobre todo los fines de semana en las que es más difícil volver a llenar los cilindros.
Además del alquiler, el paciente se debe buscar instrumentos complementarios que no brindan en su empresa y que se venden por separado. Poth estima que solo un manómetro puede costar como mínimo 100 dólares.
Una vendedora de oxígeno que prefirió no identificarse manifestó que en su distribuidora cobran 40 dólares por la recarga de oxígeno a las personas que tienen cilindros, pero de tener que prestar también la bombona solicitan un depósito de 50 millones de bolívares que será devuelto apenas regresen el equipo.
En farmacias de la ciudad el vaso humidificador puede costar 7.5 dólares, mientras las máscaras se pueden encontrar en 1.5, pero este es de los productos más económicos en comparación con el manómetro el cual puede venderse entre 100 y 190 dólares, afirmó la fuente.
Otro vendedor de oxígeno que prefirió no identificarse señaló que sus clientes, que tienen a familiares en situación crítica, gastan 80 dólares diarios para atender a una persona.
En su establecimiento no alquilan los cilindros, por lo que cada persona debe llevar su propia bombona. La recarga tiene un precio de 40 dólares en el cilindro más grande, 15 dólares en la mediana y 10 en la bombona portátil.
De no tener acceso a un cilindro propio o prestado, el gasto por comprar dos bombonas y el kit podría ser de unos 700 dólares, además de esto los gastos en recargas de oxígeno podrían alcanzar los 1,200 dólares ya que conoce el caso de pacientes que han necesitado de las bombonas hasta por 15 días continuos.
Redacción Maduradas con información de Correo del Caroní
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