José Rafael Pérez Venta, asesino confeso y descuartizador de Liana Hergueta, estuvo adscrito a la Brigada de Operaciones Especiales de la Base Naval “Contralmirante Agustín Armario” ubicada en Puerto Cabello (Carabobo) pero bajo una identidad falsa: Luis Felipe Solupe Pérez según un carnet que data del año 2012. Lo que se desconoce es cómo logró burlar a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) sin ser descubierto o apresado.
En rueda de prensa, el ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, M/G Gustavo González López, explicó que Pérez Venta desertó de la FANB antes de culminar la fase de adiestramiento básico llevándose consigo 2.800 cartuchos calibre 9×19 destinado al uso de pistolas 9mm.
Sin embargo el ministro no explica cómo es que la justicia marcial no ordenó su captura, tampoco habrían órdenes en su contra, tal como sucedió con David Rico Agreda, de 26 años edad, partícipe del asesinato de Mónica Spear, quien en enero de 2008 se convirtió en desertor de la Armada, delito por el que se le otorgó una medida cautelar sustitutiva hace seis meses que le permitía estar en libertad. Es decir en menos de un año se sabe de dos crímenes abominables que pudieron ser evitados.
El ministro González López indicó que Pérez Venta y Trejo están vinculados con varios líderes de la oposición venezolana de Voluntad Popular, Primero Justicia, Movimiento JAVU y con algunos participantes de la denominada Operación Libertad. Según las declaraciones de estos, fueron entrenados por el General Antonio Rivero, actualmente prófugo de la justicia, asilado en EEUU.
Vía El Cooperante.