Baltasar Garzón, abogado encargado de la defensa internacional del empresario colombiano Alex Saab, considera que el caso del presunto testaferro de Nicolás Maduro “es una persecución política” desde Estados Unidos.
República
Saab se encuentra detenido en Cabo Verde desde el pasado 12 de junio, donde espera por la resolución de su posible extradición a Estados Unidos, país en el que se le solicita por estar acusado de supuesto lavado de dinero.
“Esperemos que no (sea extraditado), porque no hay una causa que lo justifique, claramente es una persecución política. Está siendo utilizado como instrumento para llegar a otra finalidad y a otras personas y eso no es justo en un proceso de extradición”, dijo en una entrevista con EFE.
El letrado afirmó que en el momento de su arresto el “enviado especial” del régimen de Maduro se encontraba “en una misión humanitaria”, por lo que estaba en una situación de inviolabilidad e inmunidad, amparado por el derecho internacional que protege las relaciones diplomáticas.
“Es inviolable e inmune y por tanto no debería haber sido jamás detenido porque la desviación que se hizo a Cabo Verde del vuelo que lo llevaba fue por razones técnicas y porque dos países antes no dejaron que entrara a repostar”, indicó.
Garzón también señaló que no se cumplió con el protocolo usual en caso de irregularidades, el cual radica en la deportación o prohibición de entrada a la nación, pero nunca termina en la detención, como sucedió.
“Lo que no puede ser es que usted entre a repostar, luego le detenemos y a partir de ahí se genera la petición hasta el punto de que ni existía la orden de detención”, añadió.
El empresario colombiano fue arrestado en respuesta a una petición de Estados Unidos cursada a través de una alerta roja de la Interpol que, según la defensa, carecía de validez debido a que el nombre de Saab había sido eliminado de la lista de las difusiones de la organización policial internacional.
Redacción Maduradas con información de EFE.
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