El general Juan Francisco Romero Figueroa envió un comunicado a la fiscal general de la República, la ministra de Servicios Penitenciarios y hasta el defensor del Pueblo para que gestionen los cupos en los penales. ¿Aló Fósfora?
Romero Figueroa, el nuevo director de la Policía Nacional Bolivariana, llegó a la institución el pasado 8 de abril y desde ya hizo la advertencia sobre la posibilidad de que haya una fuga masiva de detenidos en los distintos comandos de la Gran Caracas de ese cuerpo de seguridad.
El pasado 19 de abril, el militar envió una comunicación directa a cinco altos funcionarios del Gobierno para advertirles que en la actualidad hay 575 detenidos en los calabozos de la PNB, en espacios que solo tienen capacidad para albergar a 245 personas y que además no cuentan con mecanismos de seguridad óptimos para actuar, en caso de que intenten fugarse.
La comunicación enviada desde el despacho del director de la PNB fue dirigido a la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, y a la fiscal superior del Área Metropolitana de Caracas, Maricela Lucena; también se le envió copia a la ministra de Servicios Penitenciarios, Iris Varela y al viceministro de atención al privado de libertad, Ramón García Utrera, y por último, también le hicieron llegar la advertencia al defensor del Pueblo, Tareck William Saab.
El texto firmado por Romero Figueroa, quien también fue alguna vez el director de la extinta Policía Metropolitana, detalla que solo 24 de los detenidos están ya en calidad de penados, 63 están en la etapa de juicio y los otros 478 están en calidad de procesados.
El comunicado expresa lo delicada de la situación en los centros de detención. Situación que ha sido denunciada en reiteradas oportunidades por los directores de las policías municipales de Caracas y el director de la policía del estado Miranda, Elisio Guzmán. “Solícito sus buenos oficios a los fines de estudiar la posibilidad de gestionar el ingreso a los diferentes recintos penitenciarios de los ciudadanos”, dice el texto enviado a los despachos de los funcionarios antes mencionados.
Hay que recordar que desde junio del 2014, la ministra de Servicios Penitenciario, Iris Varela, declaró que los detenidos en procedimientos por las policías solo serían recibidos en los penales cuando pasen a la etapa de juicio, es decir, hasta que el Ministerio Público presente formalmente la acusación ante un tribunal de Control, y para esto, el tiempo mínimo de reclusión de un detenido en un centro de coordinación policial o subdelegación es de por lo menos 45 días.
Esta situación ha generado conflictos en las distintas sedes del Cuerpo de Investigaciones Científica, Penales y Criminalísticas y las policías municipales. De hecho en las distintas divisiones de la policía científica, ubicada en la avenida Urdaneta, han tenido que habilitar espacios para la cantidad de detenidos que tienen, ante la negativa de la ministra Varela.
En la actualidad, el área metropolitana de Caracas solo cuenta con las cárceles de El Rodeo y Yare para albergar a los presos de Miranda, Caracas y Vargas.
Fuente: El Estímulo