René González, uno de los cinco agentes cubanos condenados por espionaje en Estados Unidos tras ser detenidos en 1998, recibió este lunes las llaves de Caracas de manos de su alcalde, Jorge Rodríguez, en la primera jornada de un viaje a Venezuela que comenzó visitando la tumba del presidente Hugo Chávez. González, que quedó en mayo del año pasado libre definitivamente tras cumplir una condena de quince años, fue recibido a su llegada al país caribeño por el ministro de Exteriores, Elías Jaua, y posteriormente por el vicepresidente, Jorge Arreaza, yerno del fallecido Hugo Chávez.
“Yo le debía esa visita a Chávez, le debía esa visita por todo lo que significó para Los Cinco porque la Revolución Bolivariana y el proceso de Los Cinco han estado paralelamente ocurriendo y nos hemos estado infundiendo ánimos los unos a los otros”, indicó González a medios estatales.
El miembro de “Los Cinco”, como se conoce a los agentes en Cuba, donde son considerados “héroes”, afirmó que quería “rendirle el homenaje que merece” a Chávez y recordar sobre su tumba que “él nunca va a morir”, reseñó el portal de dossier33.com citando a la agencia de noticias EFE. “Está con nosotros y va a estar con América Latina hasta que seamos la nación que quería Bolívar”.
Arreaza destacó la figura de Los Cinco, a quienes tildó de “héroes” porque evitaban los actos terroristas y “la muerte”. “Desde Venezuela alzaremos la voz cuantas veces sea necesario y llamaremos a que el Gobierno de Estados Unidos piense y repiense y tome la decisión justa, lo que estamos pidiendo es justicia no estamos pidiendo otra cosa”, indicó el vicepresidente.
El personaje
González fue detenido en 1998 en EE.UU. junto a Gerardo Hernández, Ramón Labaniño, Fernando González y Antonio Guerrero, cuando el FBI desmanteló la red “Avispa”, que actuaba en el sur de Florida, y fueron condenados a penas que fueron de 15 años a dos cadenas perpetuas por conspiración y actuar como agentes no declarados en un proceso judicial plagado de apelaciones.
Todos admitieron que eran agentes del Gobierno cubano “no declarados” ante EE.UU., pero alegaron que espiaban a “grupos terroristas de exiliados” que conspiraban contra el entonces presidente Fidel Castro, y no al Ejecutivo estadounidense. René González y Fernando González son los únicos que ya han sido liberados tras cumplir sus condenas, mientras que los otros tres, Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero, permanecen encarcelados.
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