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¡ATROZ! 11 tornillos y malla de titanio le colocaron a estudiante agredido por policía en protesta

Kevin Bejarano Ferreira, el estudiante y deportista de 22 años herido el pasado 4 de marzo por una bomba lacrimógena disparada por funcionarios de la Policía estadal (PEB) a manifestantes del sector Las Garzas, fue sometido ayer a una segunda intervención quirúrgica. En la operación le reconstruyeron la órbita ocular y el hueso malar.

“Le pusieron 11 tornillos y una malla de titanio”, reveló su mamá, Aurora Ferreira, para luego relatar que la operación inició a las 8:30 de la mañana de este viernes y terminó cuatro horas después porque cuando los médicos abrieron la zona se encontraron con fracturas y fisuras que no habían arrojado los primeros exámenes.

Kevin Bejarano Ferreira

Agregó que Kevin no tiene comprometida la visión del ojo izquierdo, donde recibió el impacto de la lacrimógena, y que ahora deben esperar a la recuperación de la segunda operación para nuevos exámenes oculares. Cabe recordar que la primera intervención se realizó el día que fue herido y allí le cosieron la herida abierta que le causó el golpe.
Se niegan a hablar

El equipo reporteril de Correo del Caroní contactó a Jaime López, director del Centro de Coordinación Policial (CCP) de Unare, para conocer si alguno de los funcionarios adscritos a esa comisaría está a orden del Ministerio Público por el ataque realizado, según relatan los testigos, con la patrulla 425, y su respuesta fue la siguiente: “¿Tienes pruebas de que fueron nuestros funcionarios? ¿Ya lo investigaste?”.

Al aclararle que fueron los manifestantes quienes denunciaron la situación (de la que además hay una foto de la unidad en cuestión) el funcionario manifestó: “Entonces pregúntale al Ministerio Público si están haciendo esa investigación”.

Gracias a la recomendación de López se intentó contactar a Israel Pérez, fiscal superior del estado Bolívar, para conocer si existían denuncias sobre malas actuaciones, vejaciones, torturas u otras irregularidades cometidas por funcionarios militares o policiales contra manifestantes en el estado Bolívar… pero fue imposible que contestara el teléfono, reseña Correo del Caroní.

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