¡Comeremos aviones! El Gobierno nacional tan preocupado de la crisis alimentaria que atraviesa el país compró seis aviones militares, queda claro cuales son las prioridades del Ejecutivo.
La Fuerza Aérea Venezolana (Aviación Militar Bolivariana de Venezuela) recibió a finales de febrero seis aviones reactores entrenadores Hongdu K-8W por su Grupo Aéreo de Operaciones Especiales No. 15 con sede en Maracaibo, según informa IHS Jane’s (en inglés).
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Los aviones son para reemplazar tres perdidos en accidentes y son parte de un lote de nueve, comprado en 2013. Los otros tres se esperan que lleguen pronto a Venezuela, dijeron fuentes a IHS Jane el 14 de marzo.
Originalmente, Venezuela recibió 18 aviones caza K-8Ws en enero de 2010 para el Grupo Aéreo No. 15 en Maracaibo y el Grupo Aéreo de Caza No. 12 en Barquisimeto, reseñó La Patilla.
Los K-8Ws sustituyeron a los Northrop VF-5A Freedom Fighter en el Grupo No. 12 y en el Grupo No. 15 remplazaron a los Boeing (Rockwell) OV-10 Bronco, para la realización de entrenamiento avanzado, en acciones de ataque ligero y en las operaciones contra los vuelos ilegales.
Este martes el diputado José Guerra, durante la sesión ordinaria de la Asamblea Nacional, consideró «inconcebible» traer seis aviones militares de China cuando pudieron invertirse en compra de alimentos.
El discurso de emergencia económica tal parece que no aplica a la Fuerza Armada, que sigue teniendo los mismos privilegios por parte del Estado. Además de los enemigos imaginarios, ¿para qué se arma el Gobierno?