En el año 2011 Eugenia Sader ya era señalada por supuesta corrupción en su gestión, pues los ingresos eran millonarios pero los Hospitales estaban deteriorados. En una Cadena Nacional con el difunto Hugo Chávez, Sader quedó en evidencia gracias a una matrona.
Todo ocurrió en la maternidad Candelaria García, que recibe este nombre en honor a la mujer protagonista del problema que destapó una esquina de la falta de transparencia y claridad en la gestión de Sader. Durante un contacto con Chávez, la exministra trató de evitar que el difunto presidente escuchara los reclamos de la octagenaria que exigía su pago de prestaciones.
Con muchos nervios trató de quitar el micrófono y «confundir» a Chávez, pero no tuvo éxito, reseñó el portal de NTN24.