El ministerio de Energía de Rusia descartó este jueves un recorte en los planes de extracción de petróleo en 2015, como un instrumento para estabilizar los precios en los mercados internacionales de crudo, signado por bajas cotizaciones desde el verano pasado. Maduro visitó en dos oportunidades, y en menos de una semana, la capital de Rusia con el fin de convencer sobre el recorte de producción.
Se prevé mantener los volúmenes de producción al nivel del pasado año en el entorno de las 525-526 millones de toneladas, anunció el jefe del departamento de extracción y transportación de hidrocarburos, Alexandr Gladkov durante un panel de discusión en el Foro Económico de Gaydar, que sesiona en Moscú.
No esperamos, subrayó el titular, grandes descensos en los volúmenes de producción de las compañías energéticas líderes. Colocado entre los 10 grandes productores del planeta, Rusia calcula una extracción promedio este año de 10,6 millones de barriles diarios, en similar ritmo que el recién concluido año.
Algunos analistas barajaron la posibilidad de que Rusia redujera la extracción, como un instrumento económico para influir en la estabilidad de los precios del crudo, coyuntura que ejerce una presión desestabilizadora sobre la situación en el mercado ruso de divisas y la persistente devaluación del rublo. Respecto a similar perspectiva, el ministro de Energía Alexander Novak aseguró antes de fin de año que las autoridades rusas no manejaban esa posibilidad, aunque tampoco descartó que se discuta la pertinencia de tales métodos y una revisión de los proyectos inversionistas.
El vicepresidente primero del gobierno, Igor Shuvalov, declaró, a su vez, que una rebaja de los volúmenes de crudo no se correspondía con los intereses de Rusia.
Según un pronóstico del ministerio ruso de Desarrollo Económico, las cotizaciones de crudo oscilarán en 2015 en el diapasón de los 60-80 dólares el barril. El Gobierno diseña en ese sentido distintos escenarios para la economía rusa a partir de una escala de precios de 40 a 80 dólares, indicó la publicación especializada Finmarket.
El ejecutivo ruso anunció para la semana próxima una reunión de trabajo con los directivos de las compañías petroleras con el fin de analizar la situación y evaluar estrategias tendientes a capear los efectos negativos en el sector de los hidrocarburos en general, adelantó el ministro de Energía.
Rusia registró un récord en 2014 en la extracción de petróleo con 10 millones 578 mil barriles diarios, considerado el mayor volumen en los últimos 24 años desde la desintegración de la Unión Soviética en 1991.
La producción anual totalizó las 526,753 millones de toneladas de crudo, equivalentes a un incremento de 0,7 por ciento, respecto a 2013.
Agencias