El sábado 24 de junio, Nicolás Maduro volvió a «lucirse» con un vocabulario indigno para el presidente de un país. En un acto transmitido en cadena nacional desde el Patio de Honor de la Academia Militar, celebraba la Batalla de Carabobo y el Día del Ejército cuando volvió a atacar a los dirigentes de la oposición.
Como siempre, echaba la culpa a sus adversarios por la violencia que se ha generado en el país y dijo al respecto:
“Ellos han roto todas las reglas de juego. Y nosotros tenemos que garantizar que este país, en medio de estos sectores que sabotean desde hace años el progreso, la paz y la prosperidad de la patria, garantizar que el país funcione. Pongo como ejemplo el sistema educativo. Con las guarimbas, ¿cuántas escuelas han atacado estos hijos… del diablo? Unos verdaderos hijos de… del diablo que son. ¿O no son hijos de… del diablo?”.
Y remató calificando a la resistencia como terroristas: «¿Eso (las protestas) se puede llamar oposición o terrorismo?».
Con información de Noticiero Digital
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