El gobierno venezolano trata de diseñar otro sistema cambiario en el cual «converjan» o se deslicen los actuales tipos de cambio hacia otro precio para las divisas respecto al bolívar. El Vicepresidente para el Área Económica, ministro de Petróleo y presidente de Pdvsa, Rafael Ramírez, señaló que para este año debe estar listo ese nuevo esquema cambiario pues «el que tenemos no ha resultado adecuado para la economía».
Actualmente rigen hasta 4 tipos de cambio en la economía: la tasa Cencoex, limitada a ciertos tipos de alimentos, medicinas u otros bienes esenciales, fijada en Bs 6,30 por dólar; la tasa Sicad I, que subió recientemente a Bs 10,60 por dólar y que opera para divisas de viajero, y algunos sectores industriales y comerciales; la tasa Sicad II, con un precio entre 49,90 y 50 bolívares por dólar, disponible para personas naturales y jurídicas pero con limitaciones en la asignación y liquidación; y la tasa del dólar paralelo, que es casi 7 veces el valor de la tasa Sicad I, y que sirve como marcador para costos de reposición de muchos bienes y servicios.
El ministro Ramírez afirmó que «tiene que converger» el actual sistema porque el mercado «paralelo y las distorsiones que se han creado son absolutamente inconvenientes».
Señaló que «el Sicad I y II prefiguran un nuevo sistema cambiario», del que no puede decir cuál será la tasa pero que para decidir su creación primero deben tomarse medidas previas respecto a los precios, o la cantidad de dinero circulante en la economía, por ejemplo.
No obstante, Ramírez aseguró que no implica el levantamiento del control de cambio, sino que más bien apunta a «poner las divisas, las más económicas, para temas sustanciales, que hasta ahora se ha hecho con sistemas complementarios, y responden más a una situación coyuntural que debe enfrentarse».
El ministro también destacó que se persigue un nuevo sistema «que sea permanente, que sea dinámico». En su momento, cuando se creó el Sicad II a finales de 2013, también se anunció como un sistema definitivo que daría equilibrio a la economía, que arrastra una sequía de divisas que ha sumido al sector productivo en una importante paralización casi total, y donde al menos hay 10 mil millones de dólares en liquidaciones pendientes al sector privado.
Fondos en divisas
Ramírez también fue interrogado sobre la unificación de los fondos extrapresupuestarios en divisas como Fonden. Señaló que si resulta «sano y conveniente» que se reflejen esos saldos en una cuenta en el Banco Central, «no tengo problema en hacerlo».
Añadió que se están estudiando los montos para traspasar hacia las reservas internacionales, reseñó el portal del diario El Universal.