Dos delincuentes amordazaron y maniataron con ganchos de ropa al párroco Roberto Morales, de 72 años, en la Iglesia de La Milagrosa, en Maracaibo, el domingo 7 de julio.
Composición Maduradas. Fotos: Diario Contraste / Noticia Al Día
Asimismo, los antisociales arremetieron contra los colaboradores del párroco, aplicándoles el mismo método de sometimiento que usaron con Morales.
En este sentido, los colaboradores afirmaron que los asaltantes tenían cuchillos y armas de fuego cuando ingresaron a la Iglesia. Les colocaron pantalones en la cara para que no pudieran identificarlos.
“Nosotros no podíamos hacer nada, estaban armados con cuchillos y armas de fuego y nos habían puesto unos pantalones en la cabeza para que no pudiéramos verlos”, confesaron los colaboradores.
Por otra parte, el asesor legal y colaborador de la Iglesia, Ángel Calderón confesó que los hampones buscaban objetos de valor y amenazaron de muerte a las víctimas al no encontrarlos.
“Pedían objetos de valor, nosotros les contestamos que aquí no había nada para robar. Ellos insistían y hablaban de dólares. Finalmente se llevaron ropa, zapatos, celulares y algo de efectivo”, dijo Calderón.
Además, agregó que el ensañamiento contra el sacerdote “fue brutal” pues lo torturaron y amenazaron de muerte. Ante esto el padre decía que “estaba listo” y que no lastimaran a sus colaboradores.
“Al padre le rompieron unos sacos de harina en la cabeza y le echaron detergente en la cara. Lo golpearon y amenazaron de muerte. Solo escuchábamos los gritos del padre y golpes contra las paredes. Ellos decían que nos iban a matar a todos, el padre les contestaba que solo lo mataran a él, que él estaba listo”, contó.
Por último, señaló que las actividades del templo se encuentran suspendidas pues los delincuentes se llevaron las llaves de la Iglesia y, debido a esto, deben cambiar todas las cerraduras.
También recalcó que deben esperar que el padre se recupere pues «está muy afectado» por lo que sucedió.
“Por ahora la iglesia está cerrada. Tenemos que cambiar las cerraduras, invertir nuevamente en seguridad, y esperar que el padre se recupere del todo. Es muy pronto y aún estamos muy afectados”, concluyó.
Redacción Maduradas con información de Panorama.
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