El pasado 18 de septiembre el presidente Nicolás Maduro giró instrucciones al ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, de iniciar las gestiones para adquirir a la empresa rusa Sukhoi, 12 cazabombarderos Su-30MK2, ello en respuesta al siniestro de una de las 24 aeronaves que tiene el país desde noviembre de 2006.
El nuevo capricho presidencial asciende a 540 millones de dólares, ya que cada uno de los jugueticos de la revolución tiene un precio de 45 millones de dólares.
En el presupuesto ordinario del Ministerio de la Defensa para el año en curso, fueron aprobados 518 millones de dólares para el equipamiento militar de las unidades operativas de los cuatro componentes de la Fuerza Armada Nacional. Este monto que será financiado con recursos provenientes de endeudamiento, lo que implica que para cumplir con la exigencia del primer mandatario nacional deban recurrir a créditos adicionales, que como es costumbre serían aprobados en la plenaria de la Asamblea Nacional con el apoyo del partido de Gobierno.
Si los 540 millones de dólares que serían utilizados en la adquisición de las 12 aeronaves rusas de combate, se destinaran al presupuesto del Programa de Alimentación Escolar (PAE), se pudiesen suministrar los alimentos a 2.652.218 niños durante los 202 días del año escolar, tal calculo se realiza con base en el presupuesto del programa educativo, que estipula invertir Bs. 6,35 por niño diariamente.
Mientras que si la suma se destina a la importación de alimentos, se pueden comprar 131.252 toneladas de carne, pollo, leche y algunos derivados lácteos a Brasil o 309.988 toneladas de leche, arroz, maíz, aceite, fríjol, pastas alimenticias, harinas y derivados lácteos a Argentina.
Asimismo, la exorbitante suma puede ser destinada a la seguridad de los venezolanos, que de acuerdo a los estudios de opinión es el principal problema de la ciudadanía, por cuanto si se transfieren a la Policía Nacional Bolivariana (PNB), se pueden costear los gastos de personal y operativos de 16.345 uniformados durante 6 meses.
En el sector universitario las cifras son aún más alentadoras, ya que con 540 millones de dólares se podría financiar la totalidad del presupuesto solicitado por la Universidad de Los Andes (ULA), que alberga a 59.681 estudiantes de pregrado y postgrado. En el caso de la Universidad Central de Venezuela (UCV) el dinero cubre el 90,42% de los presupuesto solicitado por sus autoridades para el año 2015, garantizando plenamente una educación de calidad de 62.539 estudiantes y los sueldos de 8.601 profesores.
El cálculo del sector universitario se realizó con base en la tasa oficial del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad), que se encuentra en 13,50 bolívares por dólar. Y partiendo de las solicitudes realizadas por casa de estudio al Gobierno nacional, pese a que los mismos no fueron aprobados en su totalidad.
Vía El Cooperante.