Cuba, un país convertido en tierra de esclavos y en una usina exportadora de sus métodos, podría estar afectando a Venezuela desde hace varios años.
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El portal Infobae profundizó en este tema, destacando que la esclavitud a la que son sometidos los cubanos es a través del sistema de empleo que implementa el régimen de Miguel Díaz-Canel y Raúl Castro, que les deja la mayor parte del salario de devengado por los ciudadanos de ese país.
Esta situación ha originado varias denuncias internacionales, la más importante ha sido colocada por la Mesa de Unidad Cubana (MUC) quienes señalaron que el gobierno cubano viola varios estándares básicos de la Organización Internacional del Trabajo.
«Queremos poner el acento en que este sistema es un sistema esclavista«, dijo a Infobae Carlos Cano Escribá, músico de 48 años exiliado en España desde 1994 y secretario de la organización.
Agregó: «El poder económico es muy poderoso y somos escépticos con la justicia, porque hay cuestiones políticas en el medio».Y es que en Cuba, es el estado onmipresente quien se hace cargo de las condiciones de contratación: «El personal cubano o extranjero residente permanente en Cuba que preste servicios en las empresas mixtas, con excepción de los integrantes de su órgano dirección y administración, es contratado por una entidad empleadora propuesta por el Ministerio para la Inversión Extranjera y la Colaboración Económica y autorizada por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social».
Este organismo es el que recibe las divisas por parte de la firma extranjera destinada al salario de cada obrero, y luego de hacer su cobro de más del 90%, el operario le da el restante al trabajador, pero no en moneda extranjero, sino en pesos no convertibles. Los trabajadores cubanos deberían cobrar 690 dólares apróximadamente, pero apenas reciben entre 25 y 40.
Como si esto fuera poco, el trabajador puede ser sustituido sin previo aviso: «Cuando las empresas mixtas o las empresas de capital totalmente extranjero, consideren que un determinado trabajador no satisface sus exigencias en el trabajo, pueden solicitar a la entidad empleadora que lo sustituya por otro».
Por otro lado, el régimen cubano recibió sanciones por parte de Estados Unidos debido a la injerencia directa que Díaz-Canel y Castro ejercen sobre Venezuela y Nicaragua.
«Cuba continúa desempeñando un papel desestabilizador en el Hemisferio Occidental«, dijo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
Este tipo de actuaciones del gobierno cubano se remonta a los primeros años de Fidel Castro en el poder, algo sobre lo que el periodista Pedro Corzo, exiliado político, explicó: «El modelo cubano no exporta una ideología, sino normas y fundamentos para la toma y la conservación del poder».
Detallaron que Castro tenía una vocación imperial y tenía intenciones de expandir su proyecto político, que no era el comunismo sino el castrismo, algo que describió como «personalista».
Agregó: «Siempre quiso el petróleo que finalmente le dio Hugo Chávez. Lo consiguió no por las balas, sino por la traición de Chávez».
Cuba ha penetrado cada uno de los círculos de decisión de la vida política y de seguridad de Venezuela. Le abrieron las puertas Chávez y Nicolás Maduro a los patrones isleños que incluso ha sometido al propio ejército. Por esto, desde el Palacio de Miraflores se pagan las cuentas a Cuba con petróleo.
La relación entre Chávez y Castro comenzó en 1994, logrando que los primeros infiltrados llegaran a Venezuela en 1999 cuando comenzaba el mandato de Chávez, un año después había un intercambio de favores entre ellos que denominaron «Convenio Integral de Cooperación Cuba-Venezuela».
Redacción Maduradas con información de Infobae.
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