Nahir Galarza, la joven señalada por el asesinato de su novio Fernando Pastorizzo rompió el silencio por primera vez desde que fue detenida.
La muchacha de 20 años permanece en la cárcel de Paraná, en Argentina, donde cumple su condena a cadena perpetua, dijo que el occiso nunca fue su novio y se quejó por la difusión que se le dio a la información sobre el caso.
«Me han demacrado en la televisión y en todos los medios. Se dicen mentiras y en realidad nadie sabe nada sobre mí. Yo no he hablado en todos estos meses porque gran parte del periodismo lo único que ha hecho es hablar mal de mí y todo se saca de contexto», dijo.
Aclaró que, “así como me veía con él, me veía con un montón de chicos más. Y no me da vergüenza decirlo porque es la verdad… Nunca tuve novio. Ni Fernando ni nadie, más que nada porque yo nunca quise. Yo era de salir todos los fines de semana para disfrutar de la edad que tengo. Sí es cierto que me veía siempre con él. Pero, a ver, verte con alguien no es ser novios”.
Descartó la posibilidad de acercarse a alguien más: “tenía algunas relaciones pero con todo lo que se dijo no creo que tengan ganas de seguir viéndome”.
Explicó que ha recibido cartas de jóvenes de todo el mundo, ellos se las envían a sus padres quienes las imprimen y se las llevan a la cárcel, en las misivas les dan palabras de aliento para que sea fuerte y descarte cualquier idea de suicidio, aunque aprovecho para desmentir que alguna vez haya intentado quitarse la vida “soy la última persona en el mundo que querría suicidarse”.
Reconoció estar molesta por “que se haya fomentado el odio hacia mí”.
Se describió: «es cierto que aparento ser fría, como si no me importa nada, no lo voy a negar. Pero lo que aparento no es lo que soy. Lo primero que me dice la gente cuando me conoce es: ‘No sos como decían en la tele’, me lo dice todo el mundo. Me pintaron como una loca. No entiendo por qué esto de ir todos contra una persona. Está bien, yo no voy a minimizar lo que pasó, pero tampoco nadie conoce la verdad”.
Explicó que está mucho mejor en la Unidad Penitenciaria Nº6 de Paraná, allí tiene compañeras con las que puede hablar, asegura que eso la hace sentir mejor.
Indicó que quiere continuar con sus estudios: «voy a seguir con la carrera de abogacía, también estoy haciendo psicología social. Yo quería rendir las materias libres, pero no se pudo. Acá hay una chica que se encarga de la educación y como yo le dije que quería seguir estudiando me va a averiguar y en un mes vamos a ver».
Redacción Maduradas con información de Clarin.
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