El periodista Nelson Bocaranda expresó que efectivamente el pasado sábado 4 de agosto ocurrió un atentado, pero improvisado, en contra el presidente Nicolás Maduro.
Comparó este hecho con la toma del Fuerte Paramacay, ubicado en el estado Carabobo, y la primera aparición de Óscar Pérez cuando sobrevoló el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) con un helicóptero del Cicpc y lanzó granadas sonoras.
Bocaranda aseguró que el gobierno venezolano conoce que existe descontento interno-«uniformados o no»-, por lo que la mayoría de sus actividades las realizan en lugares encerrados.
«El mudar la celebración aniversaria de la “gloriosa” Guardia Nacional a un lugar abierto y diferente a la tradición como fue la avenida Bolívar -un sábado- habría motivado a la célula identificada y detenida a lanzarse con la puesta en escena captada por las cámaras de diferentes medios y de celulares de los ciudadanos«, escribió el periodista para Runrunes.
«No hacerla en el patio de la Academia Militar o en Los Próceres quizás aceleró el intento fallido», agregó.
Afirmó que la confusión entre los ciudadanos reinó ante la publicación de los drones estrellándose y explotando, además de los mensajes del sector oficialista y sumado a ello las acusaciones apresuradas del gobierno en contra del presidente saliente de Colombia Juan Manuel Santos, Estado Unidos y la oposición venezolana.
Aseguró que con el ataque se evidencio la falla de seguridad en el evento. «Al menos 150 metros cuadrados en torno a la tarima presidencial deben estar protegidos de cualquier intromisión de drones y similares. Más cuando desde 2016 deben estar inscritos y permisados ante el INAC. ¿Cómo llegaron tan cerca? ¿Complicidades?», finalizó.
Redacción Maduradas con información de Runrun