La historia se repite: una vez que establecen un «precio justo» de venta, donde los productores, distribuidores y comerciantes no obtienen ganancia con los productos, estos comienzan a desaparecer.
Fue esta semana cuando el vicepresidente Jorge Arreaza estableció el precio del cartón de huevos a 420 bolívares, menos de la mitad del promedio de 1000 y 1200 bolívares en que se conseguía, sin embargo esto ha traído como consecuencia la escasez del rubro y que se hagan grandes colas para adquirirlos, razón por la cual varios establecimientos de Caracas han optado por venderlos por número de cédula.
Un tumulto de consumidores de Los Ruices exigieron a una fiscal de la Sundde a ordenar la venta por número de cédula en el mercado Don Sancho. Una consumidora que compra habitualmente en el Plan Suárez de Caurimare, donde también se aplicó el método por terminal de número de cédula, aseguró a El Estímulo que nunca había visto una cola tan larga.
En el Excelsior Gama de Santa Eduvigis se decidió vender dos cartones por 256 bolívares y asumir las pérdidas. No había regulación del producto por persona. En el automercado Plazas de Los Palos Grandes vendían una docena de huevos por 168 bolívares.
El diario La Nación reportó que en varios establecimientos de otros estados del país se decidió realizar la venta por terminal de número de cédula, como se hace con otros productos regulados.
Con información de El Universal.