Las investigaciones que hasta el momento han completado presumen que los homicidas del diputado Robert Serra y su asistente María Herrera conocían la casa muy bien. Ambos fueron asesinados en la residencia del parlamentario, ubicada en La Pastora. De acuerdo con la información dada el jueves por el ministro Miguel Rodríguez Torres además de cometer el doble crimen tuvieron tiempo de apoderarse de los videos de las cámaras de seguridad de la vivienda, cargaron con armas de fuego y dinero en efectivo.
Los asesinos estaban en el interior de la casa esperando a sus víctimas. Ni la puerta ni las ventanas de la humilde vivienda presentaban signos de violencia. De ser así es evidente que alguien de su más cercano entorno “lo vendió” al enemigo, así lo reseña Diario de las Américas.
VEA ACÁ EL ANÁLISIS DE VOA: A Robert Serra lo traicionó alguien de su más cercano entorno
La noche del asesinato algunos residentes de La Pastora lograron ingresar al interior de la casa de Serra, donde vivía con su papá y tres de sus asistentes, entre ellas Herrera. Allegados a la víctima señalaron que el cuerpo de la mujer quedó en la puerta de la cocina, ubicada al fondo de la vivienda. Al lado de las escaleras para subir al segundo nivel mataron a Serra, justo al frente de su oficina. “Los dos tenían las bocas tapadas y las manos estaban amarradas con tirros”, relató uno de los vecinos que vio la escena del crimen.
La casa del diputado, que desde afuera luce sencilla, tiene más medidas de seguridad de las que se pueden apreciar desde afuera. Hay un circuito cerrado de seis cámaras: dos están ubicadas en la fachada de la vivienda y el resto están distribuidas entre el dormitorio y en el despacho del parlamentario.
“Uno le tocaba el timbre a Robert y él veía desde adentro a quién le abría. Desde arriba él tenía un control para abrir o les decía a sus asistentes que abrieran la puerta”, precisó un conocido de Serra.
Los ladridos que escucharon los vecinos de Serra, antes de los gritos de la asistente que encontró los cadáveres, fueron los de África, la perra del parlamentario, que recientemente había dado a luz y aún vive en la casa con sus dos cachorros.
Móvil político
MARU MORALES
El diputado Diosdado Cabello afirmó que el doble asesinato de Serra y su asistente responde a móviles políticos: “Sabían lo que estaban haciendo. ¿Alguien piensa que es el hampa común? Aquí está el fascismo que está en contra de la revolución y de la felicidad del pueblo. No quede duda de que fueron asesinados para mandarle un mensaje a la revolución”, dijo antes de que los cuerpos fuesen trasladados al Cementerio General del Sur. Recordó un intercambio de palabras el martes en sesión en plenaria con Carlos Berrizbeitia (PV): “¿Recuerdan que un diputado de la oposición nos dijo que teníamos los días contados, y le respondimos que qué significaba eso? Es compañero de partido de Lorent Saleh, quien dijo que iba a eliminar por lo menos a 20 muñecos”.
Fuente: El Nacional