Nicolás Maduro esta semana aseguró que a pesar de que el petróleo hubiese caído cinco dólares, contaba con el apoyo de los ciudadanos. Según analistas, la preocupación del mandatario se presenta pues 96 % de las divisas del país se producen con la exportación del crudo.
A juicio de los economistas, el precio ideal para equilibrar las finanzas del país oscila entre 100 y 180 dólares. Así lo reseñó Alixel Cabrera en el diario La Verdad. Sin embargo, otros economistas que creen que buena parte de los ingresos serán malgastados, consideran que el costo del barril debería oscilar entre 200 y 250 dólares.
Los datos que maneja el Ministerio de Petróleo y Minería ubica el barril en 50,70 dólares. Para el economista Luis Oliveros este bajo nivel profundiza los problemas que enfrenta el país. Cita que a pesar de que el primer semestre de 2014, el precio del crudo alcanzó un promedio de 99 dólares, en el país hubo una caída de casi cinco puntos del Producto Interno Bruto, además de enfrentar problemas de escasez e inflación.
El profesor universitario asegura que para lograr un equilibrio en las finanzas del país, se necesita que el importe del barril escale hasta los 100 dólares. Acota que este escenario es “prácticamente imposible”.
“Más que hablar de un precio de petróleo que necesita esta economía, yo creo que esta economía necesita un viraje de 180 grados en la manera de hacer política económica”, insistió.
Por su parte, Emmanuel Borgucci, profesor de Economía de LUZ, consideró que el precio del barril debería aumentar entre 120 y 140 dólares para lograr una estabilidad económica en Venezuela.
Para Borgucci, 50 dólares por barril no es un mal precio. Atribuye la desproporción en la entrada de divisas al país al nivel de gasto y endeudamiento “tremendo” del Estado venezolano. De acuerdo con el profesor, el problema se presenta también por la dependencia del rubro, pues este representa 96 por ciento de la producción de divisas del país.
Oliveros indica que a pesar de que los analistas consideran ideal el precio de 180 dólares para un barril de petróleo, el Estado continuaría “malbaratando los recursos” lo que propiciaría la necesidad de un precio que oscile entre 200 y 250 dólares.