Este lunes los 24 mil niños y adolescentes, adscritos a la plantilla escolar de 132 instituciones educativas activas en el municipio Puerto Cabello, iniciaron oficialmente el período de suspensión de las actividades académicas, debido al decreto de emergencia instruido por la municipalidad, tras la escasez de agua que azota a la jurisdicción.
Entre las instituciones con mayores problemas de insalubridad están la Escuela Básica Juana García de Ladera. Escuela Bolivariana República de Honduras y E.B. Juan José Flores.
La docente con función supervisora del Municipio Escolar en la jurisdicción porteña, Carmen Rincones, anunció la medida, para precisar que inicialmente será por 10 días. Destacó que el retorno a clase de los educandos está supeditado a que se regularice el suministro de agua, con la llegada de las lluvias.
Rincones manifestó que la suspensión fue autorizada por las autoridades de la Zona Educativa de Carabobo y del viceministerio de Educación Básica.
Problemas de insalubridad, higiene de áreas comunes como las salas sanitarias y la imposibilidad de llenar los tanques de reserva de agua con que cuentan solo algunas instituciones; fueron determinantes para tomar la medida. En parte la decisión obedeció también a que en muchas casas tampoco disponen del recurso para la higiene de uniformes y de los educandos.
Colegios privados
La jefa de la Zona Educativa aclaró que la medida de suspensión fue aplicada también en los planteles escolares privados.
Rincones acotó que muchos de los planteles ya habían sido afectados por registrar más de 25 días sin suministro de agua por aducción. Ante la sequía de la represa y ríos, la dotación a través de camiones cisternas se hizo cada vez más difícil, comentaron algunos docentes.
Representantes de la sala situacional de la Zona Educativa de Carabobo se instalaron en este despacho para monitorear diariamente sí las condiciones están dadas o no para el retorno de las actividades escolares, precisó Rincones.
250 mil ciudadanos sin agua
La sequía que azota, desde hace siete meses, al litoral, tras arreciar en las últimas dos semana dejó sin agua a más de 250 mil personas en la jurisdicción, anunció Alberto Márquez, director general de la Alcaldía de Puerto Cabello.
La crisis está dada por la sequía que registra la represa de Canoabo, que abastece al 80% de la población se encuentra en tres por ciento de su capacidad. Las parroquias Patanemo y Borburata cuentan con el recurso hídrico. El resto de la población debe recurrir a llenaderos fijos o móviles. La municipalidad anunció la construcción de un llenadero frente al Hospital Naval Agustín Armario.
Emilio Torrealba, presidente de Fundacanoabo, indicó que es necesario un plan masivo de reforestación de las cuencas con cultivos como el cacao, el cual abundó en la parroquia en siglos anteriores. Mientras se siga planificando desde una oficina con aire acondicionado, nunca se va a ver la realidad, lo que acontece amerita de acciones a corto, mediano y largo plazo.
Con información de Jenny Sánchez / El Carabobeño