María Fernanda Guerra, una venezolana que emigró en enero a Cuernavaca, la capital de Morelos, en México, contó la angustia que sintió cuando ocurrió el terremoto de magnitud 8,2 en la escala de Ritcher.
Foto: El Cooperante
El sismo que se registró la noches de este jueves 07 de septiembre, dejó casi 60 muertos en varios estados mexicanos.
“Jamás había vivido un temblor así. En Venezuela si sentí algunos sismos, pero nada se compara con esto. Me dio tanto miedo que quería irme, pensé que no quería vivir más aquí”, relató la criolla quien vive con su esposo y su pequeña hija.
Califiró esta experiencia como la más fuerte y atemorizante que ha vivido. “Nos íbamos a acostar cuando sentimos cuatro sacudidas de la cama contra la pared, entonces nos sentamos y volvimos a sentir que todo se movía”.
Al asomarse por la ventana, se percató de que el agua de la piscina se balanceaba descontroladamente y se desbordaba, fue entonces cuando se dio cuenta de la gravedad del temblor.
“Sentí mucho miedo, pensé en mi familia que está en Venezuela y en que si nos pasaba algo no tendríamos a quién acudir. Fue muy desesperante”, dijo la venezolana.
Cuando terminó el temblor, Guerra regresó a su departamento, y prendió el televisor. Los noticieros del país comentaban lo sucedido y el presidente de México, Enrique Peña Nieto, realizaba una alocución especial con motivo del siniestro.
“Apenas regresé al apartamento, ya estaban informando de la magnitud del sismo, dónde había sido el epicentro, medidas preventivas ante posibles réplicas, todo fue informado rápidamente”, aseguró.
Con información de El Cooperante
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