“Soy profesional y un obrero gana más que yo, en el colegio privado me pagan Bs. 19 por cada hora trabajada y en el público gano poco más del sueldo mínimo. Amo educar, pero este salario no me alcanza para vivir”. En este dilema vive Cristina Montero, docente de inglés de un colegio nacional, ubicado en La Concepción y, a la vez, maestra por hora de un plantel privado, del sector Amparo de Maracaibo.
A pesar de tener dos trabajos, Montero —quien se encuentra en la categoría Docente II según la escala salarial nacional— percibe unos Bs. 5 mil al mes. “Por 17 horas de trabajo en un colegio privado me pagan unos Bs. 330 a la semana y esta cantidad incluye el cesta ticket que es de tres bolívares por cada hora de trabajo. Aunque en un colegio público gano un poco más (Bs. 4.975 mensual) no es suficiente porque el sueldo mínimo nos alcanzó”, expuso.
Según el Instituto Nacional de Estadística, para febrero de este año, la cesta básica se ubicaba en Bs. 3.730. Si se toma como referencia el sueldo de un docente II (Bs. 4.975,94), este profesional gastaría el 75% de su salario en comida, y el resto (1.245 bolívares) le alcanzaría para cancelar otros servicios como transporte, electricidad o agua potable.
El bajo ingreso económico por ser maestro en el país ha hecho que algunos profesionales de la educación opten por abandonar las aulas y dedicarse a otras actividades. “Ser educador es sentir pasión por tu trabajo porque, en realidad, ganamos una miseria. Conozco a colegas que han abandonado y se están dedicando al comercio informal o son taxistas y ganan mucho más por menos responsabilidades”, contó Álvaro Peña, maestro.
Así que ser educador en Venezuela significa estar cargado de paciencia y tener una verdadera vocación. Luego que en octubre de 2013 los maestros, a través de nueve federaciones sindicales del magisterio venezolano lograran un 97,66% de aumento a través de su contratación colectiva, el salario mínimo le vuelve a pisar la cola a los maestros.
Así lo ejemplificó Miguel Ángel Hernández, quien opinó sobre este tema a través de Panoramaweb, en Facebook: “Ni que hagas mil postgrados vas a ganar bien como docente. Mi papá con 25 años de experiencia, su sueldo no llega a Bs. 10 mil. El obrero que trabaja en ese colegio gana Bs. 5 mil en cesta ticket”.
Sobre esta discusión, el secretario de Educación del estado Zulia, Antonio Castejón, reconoció que es necesaria una homologación salarial, a escala nacional y regional, del ingreso anual de los docentes venezolanos.
“Por ejemplo, a nivel regional hay derechos que no tienen los docentes amparados por la contratación nacional. Vamos a homologar sueldos y derechos que han conquistado en convenios y en eso trabaja Min-Educación y la Gobernación del Zulia. Otro aspecto que estamos revisando es cuánto pagan las escuelas privadas a los maestros”, dijo.
Según la escala salarial establecida en la VII Convención Colectiva de los trabajadores de la educación, un bachiller no docente (escala más baja) debe ganar unos Bs. 3.204,21 mientras que un docente VI (escala más alta) debe ganar Bs. 7.161,58 al mes.
Para la directora de la escuela de Educación de la Universidad Dr. Rafael Belloso Chacín (Urbe), María Elena Díaz, la remuneración de los educadores del país es un tema que necesita ser discutido y debe ser uno de los puntos más trascendentes en la Consulta Nacional por la Calidad Educativa.
“Hicimos una investigación cualitativa con estudiantes de educación y egresados y al preguntárseles cómo ven el campo laboral, todos hicieron referencia a la mala remuneración (…) hace tres semanas nos reunimos en el Ministerio de Educación y se discutió esta dura realidad que vive el docente en cuanto a su remuneración, además de las pocas posibilidades de tener estudios de quinto nivel”, explicó Díaz.
Ser maestro en hoy es una vocación a todo prueba, pues deben escoger entre mantener su pasión por educar a pesar de bajos sueldos o abandonar las aulas en busca de otras vías de ingreso, reseñó el portal de canaldenoticia.com.ve.