El Gobierno de los Estados Unidos aseguró este miércoles que “no ha recibido contactos” por parte de Unasur sobre un posible rol como mediador en las tensas relaciones entre Washington y Caracas, como ha sugerido el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, e instó al Ejecutivo de ese país a comunicarse “directamente”. El Nuevo Herald.
“No hemos recibido contactos desde Unasur sobre este asunto, ni los esperamos”, afirmó un portavoz del Departamento de Estado, que pidió el anonimato, sobre la posibilidad de que el organismo regional actué como mediador en las relaciones entre EEUU y Venezuela.
En este sentido, el funcionario recordó que “mantenemos relaciones diplomáticas con el Gobierno de Venezuela, y el Gobierno de Venezuela será bienvenido a comunicar sus puntos de vista directamente a través de estos canales”.
Estas declaraciones se producen después de que Maduro anunciase este martes de manera sorpresiva que había pedido a Ernesto Samper, secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que asumiese una iniciativa diplomática para buscar un mecanismo de diálogo con Estados Unidos.
Maduro explicó que sería una iniciativa “para buscar un mecanismo de dialogo con el Gobierno de Estados Unidos para construir una diplomacia de paz, de diálogo, de entendimiento, para detener la agresión contra Venezuela”.
De hecho, Samper viajó desde Quito, sede de Unasur, a Caracas para tratar el asunto con el presidente venezolano.
Las relaciones entre EEUU y Venezuela están bajo mínimos, sin embajadores en las respectivas capitales desde 2010 y con una serie de sanciones estadounidenses a funcionarios venezolanos, la más recientes a comienzos de esta semana.
Por otro lado, el citado funcionario del Departamento de Estado recalcó que “los profundos problemas económicos y sociales que está sufriendo Venezuela no tienen nada que ver con las relaciones entre los dos gobiernos”.
“El Gobierno venezolano debería concentrarse en dialogar con la oposición política, la sociedad civil, y el sector privado para encontrar solucione genuinas y duraderas a los crecientes problemas económicos y sociales que han sido consecuencia del propio Gobierno venezolano”, concluyó el portavoz.
La economía venezolana atraviesa agudas dificultades, con una recesión estimada para 2015 del 7 %, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), y una inflación que se ha disparado a más del 50 %, como consecuencia del fuerte descenso en los ingresos fiscales procedentes de la venta de petróleo, el principal producto de exportación venezolano.
Fuente: El Nuevo Herald