Una mentira más no le hizo mal a Maduro, pero el pueblo sigue sufriendo. El pasado 3 de noviembre, Maduro prometió que llegarían al millón de viviendas o se cortaría su bigote; faltan 16.664 viviendas para llegar a ese millón. Esto requeriría que el Gobierno de Maduro construyera unas 138 casas por hora, lo que podríamos calificar como misión imposible.
Manuel Quevedo, actual ministro de Vivienda y Hábitat, informó que “un total de 983.356 unidades habitacionales ha construido la Gran Misión Vivienda Venezuela en todo el país”.
Crédito: AVN
Aunque afirmó que tiene el reporte de las 16.644 viviendas que aseguran la meta del millón de viviendas que se planteó el gobierno para este año, los especialistas aseveran que en 5 días es imposible construir tal cantidad de inmuebles.
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¡UNA HOJILLA POR FAVOR! Maduro apuesta su bigote si no llega a meta del millón de viviendas
Carlos González, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, declaró recientemente que la urbanización Caricuao, la más grande existente en el país, posee aproximadamente 20.000 apartamentos. Es decir, el gobierno tendría que terminar de construir casi una urbanización Caricuao en menos de una semana.
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Como si se tratara de una comedia, este martes el presidente venezolano, Nicolás Maduro, decidió apostar «cortar» su bigote si para el 31 de diciembre no ha cumplido la meta de llegar al millón de viviendas en la Gran Misión Vivienda Venezuela.
Por supuesto, esto no es una decisión fácil y tuvo que primero consultarlo con la «primera combatiente», que después de haberle dado el «sí», entonces procedió a declarar: “Hago una apuesta: si no llegamos al 31 de diciembre a un millón de viviendas me corto el bigote”.
“Le digo a mis hermanos trabajadores, obreros y obreras, a los ingenieros: trabajen para no tener que cortarme el bigote. No, mentira. Es una broma. Trabajen porque hace falta que nuestro pueblo tenga su vivienda”, sostuvo.
Hasta el 14 de octubre pasado el Gobierno había entregado 742,501 viviendas, según precisó ese día el ministro de Vivienda y Hábitat, Manuel Quevedo.
Al presidente le tocará ir buscando una máquina de afeitar, si es que la consigue, para cumplir su promesa de cortarse el bigote por no cumplir con el pueblo y entregar el millón de viviendas.
Con información de El Nuevo Herald / El Nacional.