La revista Veja de Brasil publicó un reportaje en el que analiza la sospechosa visita del ministro venezolano Elías Jaua a ese país, en la que sin avisar ni notificar al Gobierno, se reunió con Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra de Brasil. Pero la visita terminó en escándalo luego que su niñera, Yaneth Anza, fuera detenida al llegar a Sao Paulo con un maletín lleno de secretos bolivarianos y un arma. Este es el reportaje publicado en Veja.
El venezolano, Elías Jaua, es un experto en actividades clandestinas. En 1992, fue uno de los más de 1.000 conspiradores implicados en el sangriento intento de golpe de Estado que dio fama al coronel Hugo Chávez.
Después que Chávez ganó la presidencia en 1999, Jaua se convirtió en parte de la cúpula del nuevo gobierno, ocupando diferentes posiciones, pero siempre con la responsabilidad de entrenar y captar movimientos y las milicias armadas con el fin de implementar el “socialismo siglo XXI “en Venezuela y exportar este modelo a los países vecinos, así lo reseñó LP en su portal.
Jaua dirige desde hace dos meses el Ministerio del Poder Popular para los Movimientos Sociales. Nada más natural, pues tiene sus alianzas tradicionales entre el gobierno venezolano y las organizaciones de izquierda en otros países, entre ellos (MST) Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra de Brasil. Es sorprendente, sin embargo, que lo haga a escondidas del gobierno brasileño. Ocurrió durante el viaje del ministro a Brasil del 20 al 31 de Octubre – exactamente durante la campaña para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.
El plan de Jaua era pasar desapercibido en su visita a Brasil. El día 24, sin embargo, Yaneth del Carmen Anza, la niñera de sus hijos, fue detenida en el aeropuerto de Guarulhos al intentar entrar en Brasil con un revólver calibre 38 en el equipaje de mano, lo que configura el delito de tráfico de armas. Ella estuvo acompañada por la madre de Jaua y, según el ministro de Justicia dijo que había enviado a buscar a un avión en Venezuela en la empresa petrolera estatal PDVSA para ayudar a cuidar a su esposa, que había venido a hacer un tratamiento médico en el Hospital Sirio-Libanés .
Jaua le había pedido a la niñera que llevara un maletín con documentos en la mano, pero se le olvidó sacar la pistola que estaba dentro. Por un recurso de hábeas corpus, Yaneth fue puesta en libertad y regresó a Venezuela. La Policía Federal encontró documentos que el comisario Enio Salgado calificó como de “carácter electoral y doctrinal”. La documentación fue incautada y las copias fueron enviadas a la Corte Federal. Algunas personas que manejan los folletos describen su contenido con adjetivos “explosivos” fuertes”,” inquietantes”. La primera página de uno de ellos trae lo que parece ser el resumen de una conferencia o una clase de enseñanza de cómo hacer una revolución socialista, con elementos tales como “identificar y neutralizar al enemigo”.