Este jueves la «Defensora del Pueblo» de la República Bolivariana de Venezuela, Gabriela Ramírez, recibió de manos del presidente del Comité Internacional de Coordinación de las Instituciones Nacionales de Derechos Humanos (CIC), Lawrence Mushwana, y de la Alta Comisionada Adjunta de Derechos Humanos de la ONU, Flavia Pansieri, la acreditación clase A para la institución que representa, en base a su total conformidad con los Principios de París, relacionados con el estatus y funcionamiento de las Defensorías del Pueblo. ¿En serio?
La máxima acreditación de la ONU se da en base a los más altos estándares internacionales en cuanto a independencia (¿?), autonomía (¿?), pluralidad interna (¿?) y capacidad de acción (¿?) para la realización de su trabajo de promoción y protección de los derechos humanos.
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Desde Ginebra, Ramírez manifestó que este reconocimiento tiene gran trascendencia en momentos en que la Defensoría del Pueblo de Venezuela está siendo víctima de una campaña de desprestigio nacional e internacional. Esto, con motivo de las reacciones nacionales e internacionales generadas por sus declaraciones donde indica que la tortura tiene un sentido para obtener una confesión, algo que claramente va en contra de los más básicos derechos humanos.
Ramírez afirmó que está muy pendiente de los últimos sucesos ocurridos en el país. En ese sentido condenó la pérdida de vidas en el marco de las protestas e hizo un llamado al cese de la violencia. “La muerte nos afecta a todos como pueblo”, expresó
Fuente: Defensoria.gob