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¿EN QUIEBRA? Monto con retraso para entrega de divisas equivale al 43% de las reservas

Las empresas del sector privado se enfrentan a un entorno en el que el acceso a las divisas es sumamente lento y acumulan cuantiosas deudas con proveedores en el exterior, atrasos significativos en la repatriación de dividendos a casas matrices, caída de los inventarios, falta de insumos y, en el caso de importadores de productos finales, la imposibilidad de abastecer al mercado.

Voceros de distintos sectores han dejado en claro que las líneas aéreas esperan por el desembolso de 2 mil 600 millones de dólares, el sector químico 500 millones, los encargados de importar equipos médicos 400 millones, ensambladoras de automóviles 2 mil millones, el área farmacéutica 2 mil 300 millones y Polar, la principal empresa productora de alimentos, no recibe divisas desde hace 40 días y arrastra una deuda de 400 millones de dólares con proveedores en el exterior.

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Las cifras que maneja Fedecámaras indican que la deuda con las empresas por divisas solicitadas y que no han sido desembolsadas asciende a 9 mil millones de dólares, una magnitud que en las actuales condiciones representa una carga muy significativa.

Para entregarle dólares a las empresas que reciben la aprobación de Cadivi el Banco Central recurre a la porción en efectivo de las reservas internacionales, donde tiene menos de dos mil millones de dólares y al ingreso que recibe diariamente de manos de Pdvsa que resulta insuficiente en vista de que la mitad de los petrodólares es depositada en fondos que maneja el Gobierno como el Fonden.

Para tener una idea más clara de cuánto representa el atraso en la entrega de dólares al sector privado basta observar que los 9 mil millones que señala Fedecámaras equivalen a 43% del monto total de las reservas internacionales al cierre del 13 de enero, unos 20 mil 785 millones de dólares.

Esto indica que aún devaluando para aumentar el precio del dólar y contener la demanda de divisas, difícilmente el Gobierno podría aligerar de manera significativa los desembolsos para evitar impactos en materia de escasez y crecimiento de la economía en el primer trimestre de este año.

Podría argumentarse que aparte de las reservas internacionales el Gobierno tiene divisas en el Fonden y el resto de los fondos a donde ha dirigido la mitad del ingreso petrolero, pero las propias declaraciones de los voceros del gabinete económico no permiten mayor optimismo.

El 18 de octubre del año pasado Rafael Ramírez, vicepresidente del área económica y presidente de Pdvsa señaló que «si manejáramos el concepto de una caja única de divisas, que es el que nosotros manejamos, a través de las reservas en el Banco Central, de los aportes al Fonden y del tramo C del Fondo Chino nosotros tenemos disponible para manejar 30 mil 518 millones de dólares».

Es decir, al descontar las reservas del Banco Central de Venezuela, en el Fonden y el Fondo Chino, que tienen una larga lista de proyectos asignados y gasto rígido, en octubre de 2013 solo había 9 mil millones de dólares.

El desplome

La posición de divisas de la República descendió en 2013 en un contexto donde Pdvsa no ha podido incrementar la producción y vende barriles con descuento a países aliados, mientras que la caída de la producción y un tipo de cambio artificialmente barato catapultan la demanda de divisas.

El comportamiento de las reservas internacionales en las principales economías de América Latina durante 2013 indican que Venezuela, con un descenso de 28% y Argentina con un declive de 29% sufren la mayor caída.

Las reservas se han estado comportando en dirección opuesta a lo anunciado por Rafael Ramírez quien aseguró el 18 de octubre del año pasado que en 2013 «Venezuela cuenta con una arquitectura financiera que le permite administrar y distribuir la renta. No hemos cerrado el año. Cerraremos con el nivel óptimo de divisas que hemos establecido y que hemos estado manejando».

Si se toma como referencia el último nivel óptimo declarado por las autoridades para las reservas internacionales, establecido en 2011, el monto de cierre del pasado año se ubicó 5 mil 300 millones de dólares por debajo de lo prometido por Rafael Ramírez.

A pesar de que el precio del petróleo se ubicó en un promedio de 99,4 dólares durante 2013 Venezuela no pudo ahorrar divisas, todo lo contrario.

Formalmente el país no cuenta con un fondo de ahorro para enfrentar una eventual caída de los precios del petróleo en momentos en que la economía se ha hecho altamente dependiente de las importaciones, así lo reseña el diario El Universal.

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