El canciller del régimen de Nicolás Maduro, Jorge Arreaza, aseguró este martes 30 de abril en una entrevista telefónica con Efe que «el país está en total normalidad», pese a que las manifestaciones opositoras continúan en Caracas.
Foto: AFP
Agregó, sin embargo, que «cualquier escenario es posible» en los próximos días.
«El país está en total normalidad, salvo una urbanización de clase media alta de nombre Altamira (en Caracas), que ha sido el foco de la manifestaciones opositoras desde el año 2002″, comentó Arreaza.
En este sentido, comentó que el pronunciamiento del presidente encargado, Juan Guaidó, ha sido «en un puentecito que está frente a la autopista» donde «unos 24 militares y unos dirigentes de la oposición más extrema venezolana hicieron un llamado a golpe de Estado».
«Luego se trasladaron hasta la urbanización, hasta la plaza con algunos militantes y esta es la situación», consideró Arreaza, quien subrayó que «los 16.000 kilómetros del territorio venezolano están en absoluta paz salvo el foco tradicional de las protestas de la oposición de Altamira».
Guaidó, acompañado por el también opositor Leopoldo López y unos 40 militares se dirigieron al frente de la base militar La Carlota, desde donde pidió a sus simpatizantes que salieran a apoyar el movimiento que había iniciado unas horas antes.
Posteriormente, ante el fracaso por el intento de acceder a la base militar, se retiró de la zona y sus simpatizantes se echaron a las calles de Caracas.
En la zona de Altamira, en el este de la capital venezolana y muy cerca de la entrada a La Carlota, se han multiplicado los disturbios y enfrentamientos entre opositores y fuerzas del orden que permanecen leales a Maduro, puesto que hasta el momento no hay información acerca de ningún cuartel en el que haya habido otros levantamientos.
En este contexto, Arreaza aseguró que los militares «son leales a la Constitución bolivariana y en consecuencia al gobierno» de Nicolás Maduro.
En este sentido, aseguró que no tiene reportes de fallecidos, algo que, aseguró, «es lo que están procurando y buscando» en la oposición.
Para el canciller, los acontecimientos son «un capítulo, un guión reiterado, repetitivo incluso y que sabemos cómo manejar esta situación».
Asimismo, explicó que el gobierno no tomará medidas concretas, sino que «hay un sistema de justicia militar, unos reglamentos militares y ellos han incurrido en una serie de faltas», por lo que «tendrán que asumir las consecuencias como cualquier ciudadano que viola las leyes».
«Aquí las manifestaciones pacíficas en Venezuela están autorizadas», agregó en referencia a posibles manifestaciones futuras y antes de hacer «un llamado» a los opositores para que pidan a sus líderes «a que se sienten» a negociar.
«Estamos esperando por el diálogo, sentarse como venezolanos que son a cualquier tipo de aproximación y soluciones compartidas», explicó.
Al ser preguntado sobre si espera que se retome el diálogo con mediación internacional, hizo hincapié en que cree «en la democracia» y por tanto considera «que el tiempo de dialogo nunca pasa».
«Siempre vamos a apostar (por) el diálogo y no hay otra manera», comentó.
Por eso, envió un mensaje a López, a quien pidió «que se entregue a la justicia porque está prófugo», y a Guaidó le pidió «que cese en la locura e infantilismo político y se siente a dialogar como parte de un poder publico», así como que «se libere de las cadenas de Washington».
Al ser consultado acerca de si cree que la situación se puede reproducir en los próximos días con otros militares que sigan el ejemplo de quienes se han levantado hoy, Arreaza no lo descartó al considerar que su proyecto político «es una revolución asediada por la élite dominante y el ejército más poderoso que haya conocido la humanidad», por lo que «cualquier escenario es posible».
Redacción Maduradas con información de EFE
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