Gerardo Carrero es otro de los tantos presos políticos que continúan privados de su libertad y sin el menor respeto a sus derechos humanos, civiles o fundamentales. Su padre, del mismo nombre, se encadenó frente a la sede de la Defensoría del Pueblo, pues asegura «ya está cansado» de la situación.
El padre del estudiante Gerardo Carrero se encadenó en la Defensoría del Pueblo en San Cristóbal como medida de presión por la falta de atención médica a su hijo, recluido en el Servicio Bolivariano de Inteligencia en Caracas desde abril de este año después de permanecer 11 meses en “la Tumba”.
“Ya me cansé de que se burlen de la violación de los derechos humanos en este país”, dijo a los periodistas Gerardo Carrero, padre. Agregó que exige que se resuelva el problema de su hijo, que requiere de atención médica.
“Desde hace más de ocho meses estoy pidiendo que mi hijo sea atendido. Ha sido una lucha para que lo llevaran al hospital militar, donde le hicieron unos exámenes médicos, una biopsia, y después de cuatro meses es que sabemos el resultado y no se le ha tratado ni se le ha dado el tratamiento oportuno. Estoy cansado de que se esté jugando con la vida de Gerardo Carrero”, dijo. Ratificó que su hijo, detenido en las protestas en las inmediaciones del PNUD en mayo de 2014, es inocente.
“No duermo de solamente pensar la situación que está pasando mi hijo y que no se le dé la atención médica oportuna y se le viole el derecho a la salud, que es el mismo derecho a la vida”, agregó Carrero.
Dijo que le daba un lapso de 48 horas a las instancias del gobierno nacional para que emitan una declaración sobre el caso, pues de lo contrario radicalizaría su protesta.
Hugo Caro, defensor del pueblo (encargado) en Táchira, indicó que el 4 de noviembre pasado el padre de Carrero acudió a esa instancia y presentó un escrito en el que advertía que su hijo tenía problemas de salud. El funcionario aseguró que la denuncia fue tomada y se le designó un defensor público. Sin embargo, por la radicación de la causa, esta fue remitida a Caracas.
Con información de El Nacional.