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¡IMPACTANTE! La historia del niño que casi matan en una clínica caraqueña: se recupera en España (+Video)

Un niño de 4 años casi muere en una clínica venezolana por mala praxis. Actualmente, en España puede recuperarse de las erradas prácticas médicas que casi lo matan.

El pequeño, de nombre Santiago José Jiménez, nació en Maracay el 20 de marzo de 2012 y hoy se puede considerar un verdadero milagro el hecho de que aún esté vivo, reseñó el periodista Noé Pernía para Caraota Digital.

Foto: Caraota Digital

Foto: Caraota Digital

Cumplidos los tres meses de edad, los padres del niño detectan una insuficiencia cardiorespiratoria y lo ingresan a un hospital privado de Caracas. Ese mismo día lo trasladan a la Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica (UTIP) de otra clínica privada al norte de la capital. Allí comenzó el infierno médico de Santiago y el suplicio de unos padres desesperados.

El 29 de junio de 2012, al pequeño le practican un cateterismo y el 10 de julio siguiente es intervenido en quirófano. El 16 de julio le efectúan una resonancia magnética en el cráneo; al concluir el estudio, el niño queda paralítico de forma inexplicable.

El 20 de agosto, los médicos tratantes de Santiago le practican una traqueotomía “tardía ya que el paciente tenía más de 55 con ventilación mecánica”, según acota el papá. Ese mismo día, a Santiago se le rompen las vías aéreas luego de la traqueotomía.

El niño sufre quemaduras de tercer grado en la cabeza, la frente y el tórax, luego de unas terapias de calor que le aplicaron del 20 al 31 de agosto de 2012. Dichas terapias eran para curarlo de un enfisema subcutáneo. El 31 de agosto sufre un paro cardiorespiratorio.

El 28 de abril de 2013, una aeroambulancia vuela a España con el niño y los padres. Santiago es ingresado en el Hospital Sant Joan de Deu en Barcelona, donde la compañía de seguros de Santiago José cubre los gastos internacionales, sin embargo, atraviesa dificultades debido a los problemas cambiarios y la política monetaria, por lo que han suspendido los pagos a la familia, otra dificultad para sus padres, quienes piden colaboración monetaria para costear los tratamientos médicos.

La corrupción en Venezuela cercó a la familia; primero, con la mala praxis y la gestión incompetente de médicos y enfermeras; segundo, la póliza de seguros quiso facturarle medicamentos y procedimientos que no se utilizaron.

Con información de Caraota Digital.

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