Ni el cansancio, ni las horas de viaje, ni la incomodidad ni la frustración les importa a los venezolanos cuando se trata de escapar por horas de la crisis humanitaria que vive el país, así como de grandes colas para poder comprar un producto de primera necesidad o medicinas.
Ese fue el caso de Yelitza Lara, una mujer que viajó 12 horas desde el estado Apure hasta la frontera tachirense junto con su hija de tres meses de nacida. Su misión era cruzar el Puente Internacional Simón Bolívar, el cual comunica a San Antonio del Táchira y Cúcuta, para poder comprar pañales, leche y alimentos.
Créditos: Reuters.
«Vengo a comprar los artículos de primera necesidad y la leche de mi hija, que no consigo a precios regulados. Me sale más barato venir a Colombia que pagársela a un bachaquero a más de 20 mil bolívares. Ya en Venezuela ni la alimentación de un bebé está garantizada”, expresó.
Llegó a la avenida Venezuela de la capital del municipio Bolívar del estado Táchira a las 4:00 de la mañana. Llevaba dos maletas, dos cobijas y a su hija en brazos. Al igual que miles de personas, esperaba que fuesen las 6:00 am para cruzar.
A las 8:00 de la mañana ya Yelitza estaba en “La Parada de Cúcuta”, esperando encontrarse con alguien que pudiera ayudarla en el trayecto, mientras descansaba con su pequeña en brazos.
Con información de El Pitazo
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